Vecinos de Praderas del Sur denuncian robo de luminarias y exigen obras urgentes
Instalaron por cuenta propia luces en un ingreso clave, pero fueron robadas. Piden respuestas al municipio y advierten sobre riesgos por falta de accesos y cercanía a una planta de gas.
Un nuevo hecho de inseguridad golpeó al barrio Praderas del Sur, donde vecinos denunciaron el robo de luminarias públicas instaladas de forma autogestionada para mejorar la escasa iluminación en el ingreso por calle Rivadavia. Un video tomado por un joven del barrio registró el momento en que una persona sustraía una de las farolas solares colocadas por el centro vecinal.
La luminaria robada era una de las pocas que los vecinos lograron adquirir mediante colectas y gestiones comunitarias. A pesar de su alto costo y del esfuerzo colectivo, el hecho delictivo obligó a retirar las demás para evitar que corrieran la misma suerte. Según relatan, la zona afectada es muy transitada y peligrosa, ya que carece de veredas y permanece en total oscuridad durante la noche.
Mauricio Quiroga, vecino del barrio, expresó la frustración de una comunidad que lleva más de una década reclamando mejoras estructurales. Además del robo, señalan la necesidad urgente de abrir la calle General Paz, para garantizar conectividad y seguridad ante eventuales emergencias. En el verano pasado, un incendio de pastizales dejó en evidencia la falta de accesos adecuados, hecho que fue advertido también por los bomberos.
La cercanía de una planta de gas a menos de 150 metros del barrio incrementa la preocupación de los residentes, quienes temen no poder evacuar rápidamente ante una emergencia. A esto se suma el malestar por lo que consideran un trato desigual en comparación con otros barrios donde sí se han concretado obras viales y de iluminación recientemente.
El vecino también destacó que los habitantes de Praderas del Sur han realizado múltiples presentaciones formales ante el municipio, sin obtener respuestas efectivas. Reclaman que los conflictos administrativos entre el Estado y desarrolladores privados no sigan dejando a más de 150 familias atrapadas en la postergación. Mientras tanto, el reclamo es claro: obras mínimas pero urgentes, como la apertura de un tramo de 100 metros de calle General Paz y una iluminación básica para garantizar la seguridad de todos.
