Omar Profini cuestionó las políticas de estado en torno a la Yerba Mate
El empresario local indicó que en los últimos 20 años las autoridades de gobierno han entorpecido la labor del sector productivo
El empresario yerbatero Omar Profini ha alzado su voz contra las políticas estatales que han impactado negativamente en el sector de la yerba mate. Con varias décadas de experiencia en la industria, Profini no ha dudado en criticar abiertamente las decisiones gubernamentales que, según él, han obstaculizado el desarrollo productivo y económico de la región.
Profini destacó que durante los últimos 20 años, las autoridades gubernamentales han implementado medidas que han resultado contraproducentes para el sector yerbatero. Señaló que estas políticas han generado una reducción en la superficie destinada al cultivo de la yerba mate y han contribuido al aumento significativo de los precios del producto en el mercado.
Una de las principales críticas de Profini recae en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), el cual, según sus palabras, ha actuado como una "máquina de impedir" el progreso y el desarrollo en la industria. Profini denunció que el INYM ha interferido en la operación de las empresas yerbateras, imponiendo regulaciones y restricciones que limitan la innovación y la eficiencia en la producción.
El empresario también compartió detalles sobre los desafíos específicos que enfrentan las empresas del sector, incluyendo los obstáculos burocráticos y las limitaciones impuestas en cuanto a la expansión y modernización de las instalaciones. Además, Profini reveló que su empresa ha debido recurrir a acciones legales para proteger sus intereses ante lo que considera decisiones arbitrarias por parte del INYM, llegando incluso a enfrentar prohibiciones de plantación impuestas por el instituto.
Sin embargo, Profini no solo se limitó a criticar estas medidas, sino que también ofreció una solución para revitalizar la industria yerbatera: la desregulación. Argumentó que eliminar las barreras regulatorias y permitir una mayor libertad en la producción y comercialización de la yerba mate sería beneficioso tanto para los productores como para los consumidores. En su opinión, la desregulación fomentaría la competencia y premiaría la eficiencia, lo que en última instancia conduciría a una mejora en la calidad del producto y a precios más accesibles para el público en general.
Omar Profini