Éxito rotundo del Festival Nocturno de Riendas en Justiniano Posse
Competencia de alto nivel con jinetes de toda la región y más de 50 caballos en pista
Justiniano Posse vivió una noche inolvidable con el Festival Nocturno de Riendas, un evento que reunió a jinetes de distintas localidades y destacó por la destreza, la camaradería y la pasión por la equitación. Con más de 50 caballos en competencia, la jornada se desarrolló con gran éxito, consolidando a la localidad como un referente en este tipo de encuentros.
Desde la organización, Margarita Gómez y Marcelo Almada resaltaron la importancia del apoyo recibido y el esfuerzo de la comunidad para llevar adelante el festival. "No es fácil, pero tampoco imposible. Gracias a Dios tenemos un equipo que nos acompaña y nos ayuda. También es fundamental el respaldo de la municipalidad, que nos alienta a seguir adelante", expresó Gómez. Uno de los grandes logros de esta edición fue la decisión de trasladar la competencia a la noche, buscando cuidar a los animales del intenso calor diurno. "El sueño se cumplió, y eso nos da una alegría inmensa", agregó.
El evento no solo destacó por la participación de jinetes de diversas edades, sino también por la organización impecable. "La seguridad es clave. Contamos con veterinario, ambulancia y el apoyo de la policía. La gente busca eventos bien organizados y con controles adecuados", explicó Almada.
Los competidores llegaron desde Villa Cazador, Río Tercero, Bell Ville, Ballesteros, Morrison, San Marcos y hasta de Venado Tuerto, destacando la convocatoria regional del festival. Entre ellos, Lucas Quevedo, de solo seis años, quien recientemente obtuvo el título de campeón en la categoría Mini Menores. "Lo que más me gusta es la gente que me ve competir", expresó con entusiasmo. También participó Julia, de cinco años, quien comenzó a montar hace apenas un mes y compartió su ilusión por la competencia junto a su caballo Moncho.
Además de las jóvenes promesas, jinetes experimentados destacaron el valor de estos eventos para mantener viva la tradición. "Venimos a disfrutar con la familia y a representar el esfuerzo de años de trabajo con los caballos", comentó uno de los participantes. Otro de los asistentes, oriundo de La Borde, resaltó la importancia de la preparación previa: "Lo más lindo es entrenar toda la semana para llegar listo al fin de semana".
