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Ernesto Gavier asumió la presidencia del radicalismo local.

El nuevo Comité de Circuito del Radicalismo de Bell Ville comenzó su mandato con un acto en la sede partidaria de Ameghino 20.

Ernesto Gavier asumió la presidencia del radicalismo local.

El nuevo Comité de Circuito del Radicalismo de Bell Ville comenzó su mandato con un acto en la sede partidaria de Ameghino 20.

El pasado martes por la noche, Ernesto Gavier asumió como presidente del Comité de Circuito del Radicalismo de Bell Ville, sucediendo a Marcelo Filippi. Durante el acto, estuvieron presentes afiliados, simpatizantes y dirigentes del partido, entre ellos, el intendente Juan Manuel Moroni y el legislador Carlos Briner.

Ernesto Gavier destacó que tanto el Comité de Mayores como el de la Juventud Radical surgieron de listas de unidad: "No competimos por el comité porque entendimos que la situación crítica del país no daba para disputar una elección interna". Además, mencionó la integración de diversas generaciones dentro del partido, enfatizando la importancia de combinar diferentes visiones y pensamientos bajo el mismo ideal radical.

Subrayó el papel del radicalismo en la ciudad y la provincia, afirmando que en Bell Ville el partido es oficialismo, mientras que a nivel provincial y nacional, se mantienen como oposición. "Nadie puede decir que seamos una oposición obstruccionista. Intentamos ser siempre constructivos", comentó, resaltando que el foco principal del partido es mantener un radicalismo fuerte y unido.

Tras asumir su nueva responsabilidad, Gavier reflexionó sobre los 41 años de democracia en Argentina y la evolución del radicalismo durante este tiempo. Comparó los primeros años de la vuelta a la democracia con la situación actual, destacando que en aquellos tiempos existía un mayor respeto por las instituciones y la oposición. "Raúl Alfonsín ofreció la presidencia de la Corte Suprema a Ítalo Lúder, su adversario en las elecciones de 1983. Hoy vemos una disputa enorme por la integración de la Corte", señaló.

Sin embargo, el flamante presidente partidario reconoció que la democracia argentina ha ido perdiendo calidad institucional con el tiempo: "No podemos decir que estemos en una democracia genuina donde todas las voces sean escuchadas". Pese a ello, Gavier mostró esperanza en que, con buena voluntad, se pueda lograr una democracia estable con justicia social y seguridad jurídica.

El acto culminó con un llamado a la unidad partidaria y a seguir trabajando en conjunto con las autoridades locales y provinciales para fortalecer la presencia del radicalismo en la región.

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