Andrea Céliz en el acto del 25 de Mayo

La vicepresidenta del Concejo Deliberante brindó un discurso que apeló a la historia, la identidad local y el compromiso colectivo.

En el marco del 215º aniversario de la Revolución de Mayo, Belville fue escenario de un acto patrio cargado de emoción, historia y reflexión. La vicepresidenta del Concejo Deliberante, Andrea Céliz, fue la encargada de dirigir unas sentidas palabras al público presente, con un discurso que invitó a repensar el significado de aquella gesta revolucionaria de 1810 en el presente argentino.

Céliz remarcó que la Revolución de Mayo no debe entenderse como un hecho cerrado en la historia, sino como un proceso que continúa vigente cada vez que los ciudadanos se comprometen con el bien común.

A lo largo de su intervención, la funcionaria reconstruyó el contexto histórico que llevó a la formación del primer gobierno patrio. Desde las tensiones en el Virreinato del Río de la Plata hasta la conformación de la Primera Junta, la evocación fue también una invitación a reconocerse como protagonistas de una nueva etapa transformadora, donde el legado de figuras como Belgrano, Moreno, Paso y Saavedra sigue vigente.

Céliz conectó el pasado con el presente a través de referencias emotivas a la historia local de Bell Ville: escuelas, instituciones, espacios públicos y personajes que forman parte del tejido social de la ciudad fueron mencionados como símbolos de una identidad viva. La funcionaria también recordó a los héroes de Malvinas y a todas las personas que, desde distintos ámbitos, hacen patria cada día.

Citando el pensamiento de Mariano Moreno, reflexionó sobre la importancia de la equidad, la participación y la defensa de los derechos ciudadanos como pilares de la república. Y cerró con un llamado a la unidad nacional, a cerrar grietas y a construir desde el respeto, la ética y la democracia.